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El símbolo de ACUARIO es un ángel (o una persona, según distintas opiniones) que lleva un jarrón, del que vierte sobre la Tierra las ondas del cosmos para renovar la energía y devolver a la humanidad la sabiduría que ha adquirido.

Para poder hacerlo, claro está, ha de ser generoso y pensar en los demás. Y debe mirar el mundo y a las personas desde una perspectiva elevada, lo cual le permite ver hacia donde van y anticiparse al futuro.

Así ACUARIO es un signo de independencia, cambio y progreso, que observa a los demás para poder mejorar su vida y que manifiesta el espíritu de fraternidad universal y de igualdad entre las personas. Aporta su visión innovadora y despierta en nosotros el deseo de evolucionar.

Es un signo al que nada puede escandalizar ya que es el mayor conocedor de la naturaleza humana, que respeta por igual la libertad y la individualidad de cada cual. Sus más claros representantes parecen transmitir una cierta pureza, reflejo de su elevado propósito,  ya que se trata de personas esencialmente buenas y con una rara sencillez.

Este signo posee determinación, firmeza, y una honestidad incombustible. Tiene una seguridad muy especial, como si supiera algo que los demás ignoramos, y gran confianza en sí mismo. Su proverbial actitud amistosa, tolerante y afable le granjea grandes simpatías y en numerosas ocasiones sus actividades adquieren resonancia pública.

ACUARIO es decidido, altruista y humanitario, de espíritu progresista y dotado de un innato sentido de la justicia. Es un ser idealista y solidario que no sabe ser mezquino y no conoce el rencor. Siendo el signo de la democracia, tiene un gran concepto del civismo y predica la solidaridad entre las personas y los pueblos. Sigue a rajatabla los dictados de una ética que -todo hay que decirlo- puede obedecer a su propio y particular código.

Estamos pues ante un gran ciudadano del mundo, sociable y abierto donde los hubiere, que vive y deja vivir sin juzgar ni tratar de imponer sus propios criterios. Es un auténtico rebelde con mil y una causas por las que luchar, si bien no es combativo, dedicándose preferentemente a preparar el terreno para que sean otros los que lleven a cabo los cambios que él propugna.   

A menudo ACUARIO es signo de personas cultivadas, incapaces de hacer algo de manera mecánica y poniendo siempre en sus actos y sus relaciones un renovado interés. Se diría que no quiere pertenecer al mundo real que le perturba con sus injusticias, sus normas, su vulgaridad y sus desvaríos pasionales.

En el fondo ACUARIO se siente diferente, especial y de alguna manera, mejor que los demás a los que mira por encima del hombro. Parece querer dejar de lado sus propias sensaciones y necesidades físicas, que por descontado siguen existiendo, lo que da lugar a las contradicciones e incongruencias típicas de este sorprendente signo.

Dotado para la captación más sutil, ACUARIO presenta una clara hipersensibilidad nerviosa, con muchos altibajos. Tiene grandes dotes para prever el futuro, pero puede llegar igualmente a la utopía .

Como si fuera un emisario destacado en un país extranjero y hostil ACUARIO llega a sentirse incomprendido, solo, y se aísla pues le cuesta mucho llegar a adaptarse. Entonces huye hacia delante y ejerce en su vida personal lo que a nivel elevado es una de sus funciones: el cambio. Cambia de trabajo, de ideas, de amistades, de pareja…de vida. Es el inconformista nato.

Es el signo más dado al comportamiento errático y anárquico, extravagante y excéntrico, en ocasiones con el único propósito de provocar o de sentirse distinto a los demás. No obstante, en honor a la verdad, lo que no le sucede a ACUARIO no le pasa a nadie más. Lo imprevisto y lo imprevisible son una constante en su vida, y el concepto de vivir al día probablemente es de su invención. Su existencia suele tener un toque de originalidad que acostumbra a cultivar a conciencia.

Sus reacciones, fuertes y súbitas, resultan imprevisibles. Se deja llevar por sus impulsos y es precipitado, e imprudente llegando a parecer egoísta. Por regla general, a ACUARIO no le importan las consecuencias de sus actos, no sabe encajar en la rutina y adora, por encima de todo, su libertad. Le tiene sin cuidado la opinión de los demás –a no ser que se cuestione su ética- y puede llegar a exasperar al más impertérrito con sus actitudes rígidas y su brusquedad.

Aquella frase que dice algo así como “Yo soy yo y mi circunstancia” tiene mucho que ver con ACUARIO. Es como si esa “circunstancia” a la que se refiere fuera la parte de persona “normal”, que todo representante de este signo lleva lógicamente consigo pero que parece molestarle, y con la que a veces no sabe convivir.

La Mente de Acuario

Digna representante de Urano, que es su planeta, la mente acuariana parece dotada de una potente e invisible antena que le permite captar lo que a la mayoría pasa desapercibido. Tan intuitivo como cerebral, mentalmente ACUARIO es como una computadora que recoge y procesa incansablemente todo tipo de información. Su fina percepción, no obstante,  capta también vibraciones que le alteran y le vuelven irritable e inestable.

Su insaciable curiosidad es amplia y abstracta abarcando por igual la ciencia, el arte y el ser humano. En todos los ámbitos busca investigar y experimentar, llegando a desarrollar una percepción casi infalible de los demás, a los que capta profundamente de forma casi telepática. Claro que también se ayuda de su tendencia a hacer preguntas inquisitivas, que bordean la falta de tacto cuando no llegan de pleno a la desconsideración.

Pero ACUARIO es un buen confidente, siempre interesado en el intercambio de ideas a pesar de que las suyas suelen ser sorprendentemente inamovibles. Es tan obstinado como brusco y, si bien puede llegar a asentir para no entrar en polémicas, sus criterios no variarán ni un ápice. En este signo, y es otra de sus contradicciones, que es tan tolerante en relación a los demás se da un talante ciertamente conservador en relación a sí mismo. 

Su mente es brillante, llena de un talento que puede lindar con la genialidad del mismo modo que con la locura. Tiene ideas luminosas, aporta un enfoque innovador y tiene al mismo tiempo una clara visión de conjunto y capacidad de sintetizar.

Se expresa con claridad, con argumentos concretos y precisos que provienen de un criterio tan  independiente como rotundo, ya que rechaza las medias tintas. Está dotado de un gran sentido crítico, agudeza, perspicacia e ingenio. Pero puede caer en el cinismo, hacer comentarios intempestivos y dar respuestas demasiado taxativas cuando no simplemente cortantes.

ACUARIO es un signo inclinado a la sinceridad –a veces a un nivel casi brutal-, a pesar de que prefiere no explicar sus motivos. Necesita que se confíe en él aunque no tiene nada de ingenuo: si deposita su confianza en alguien previamente le ha sometido a un análisis relámpago que raramente falla.

Normalmente es discreto y cumplidor, evita las conversaciones banales y los cotilleos mezquinos. ACUARIO no se mete donde no le llaman, manteniendo un trato apacible y una contagiosa serenidad que actúa de filtro de las influencias disonantes de su entorno. Dotado de una gran capacidad de desimplicación, sabe mirar las cosas tomando perspectiva, con un enfoque objetivo que puede parecer impersonal y le lleva a ser frío y algo distante.

Su inteligencia abstracta e intuitiva le permite tener, en ocasiones, el preciado don de la oportunidad. Es creativo y un buen investigador,  pues tiene la necesidad instintiva de cambiar las cosas y se anticipa a su tiempo. Es un experto en la elaboración de proyectos a largo plazo si bien para las cosas cotidianas puede ser algo torpe, como el más típico sabio distraído.

No es que sea un signo específicamente despistado sino más bien que su memoria es “selectiva”, capaz de absorber información de distintas fuentes al mismo tiempo, pero dado a olvidar o desatender lo más trivial.

Con un pie en la realidad y el otro en las nubes, borrando las limitaciones y eliminando las barreras, se dice que lo que piensa hoy ACUARIO puede ser el pensamiento del mundo dentro de cien años. Y eso a los acuarianos, como no, les llena un orgullo que puede llevarles a creerse superiores a los demás y hacer que no sepan reconocer sus errores .

ACUARIO necesita diferenciarse de un modo u otro y tiende a llevar inconscientemente la contraria, a veces solo porque sí. En ocasiones esto puede hacerle actuar de un modo desconcertante, incluso en contradicción consigo mismo. Tiende a la ansiedad y la irritabilidad y, si habitualmente es muy sociable, necesita períodos de aislamiento total.

Acuario y las relaciones

Estamos ante el signo de la amistad en mayúsculas, el que patentó la solidaridad, cree en la igualdad entre las personas y trata de ampliar sus experiencias constantemente. Por ello le cuesta, de entrada, dedicarse en exclusiva a una sola persona, con lo que hay que diferenciar claramente las relaciones amistosas del amor.

Por encima de todo, ACUARIO ama su independencia y necesita espacio vital. El amor, más que como una inclinación sentimental hacia alguien en concreto, tiene sentido porque crea cercanía, forma nuevos grupos humanos y extiende el afecto hacia otras personas. En este enfoque, algo abstracto, es en el que se siente más cómodo.

Procura eludir las experiencias demasiado sensuales pues no quiere ser esclavo de sus deseos. El compromiso para ACUARIO suena a obligación y no soporta las imposiciones, del mismo modo que las relaciones exclusivas le parecen un intento de acapararle y detesta la posesividad. Intentar controlarle equivale pues, fácilmente, a perderle.

Este signo, tan inclinado a vivir para los demás parece tener dificultades para vivir con ellos.  No es un signo fácil para la convivencia cotidiana, ya que no da la menor importancia a muchas de las cosas que representan seguridad y estabilidad para los demás signos y la flexibilidad no es una de sus virtudes.  Se despreocupa de las obligaciones domésticas y huye de la rutina. Siempre sorprendente y dificil de seguir, le encanta improvisar y vivir a su aire. 

Básicamente liberal, no le gustan las ceremonias, lo convencional o burgués y no valora la posición económica, pues más bien huye de las posesiones materiales para no llegar a depender de ellas. Tiende a enfocar sus pasiones desde una vertiente intelectual, tratando de racionalizarlas para no ser poseído por ellas. Sus relaciones las dicta su corazón pero no sus emociones, a las que prefiere ignorar.

Evita demostrar sus sentimientos y revelar sus intenciones. Es básicamente individualista, más sensible a las necesidades y emociones de cualquier colectivo que a las de la persona que tiene delante o incluso a las suyas. Suele evitar las demostraciones pasionales que, de un modo quizás inconsciente, le devuelven a una faceta primitiva o a unos instintos animales que cree haber superado y que rechaza.

La amistad ocupa siempre el primer lugar para ACUARIO, por delante del amor e incluso de la familia, por la que se siente restringido. Desconoce el odio y rechaza todo aquello que sea sucio y soez, pero le cuesta igualmente conectar con el amor y la auténtica intimidad. Normalmente se siente más cómodo en las relaciones de tipo platónico, que permiten el acercamiento con la coartada de la amistad. La sexualidad es únicamente una faceta más de la vida que no suele ser prioritaria, aunque como amante sabe ser tierno y se entrega a proporcionar placer a su pareja.

Tiende a huir del matrimonio y prefiere las uniones libres o las relaciones poco convencionales, que le dejen un amplio margen de libertad. Desconoce los celos hasta un extremo que puede confundirse con un frío desinterés, pero que implica un profundo respeto por la libertad de la otra persona. Normalmente, de todos modos, ACUARIO suele ser fiel como una muestra más de su lealtad inquebrantable.

Ya sea a nivel de amigo o como pareja y a pesar de sus altibajos, es un compañero excelente, que te tratará siempre como a su igual, con amabilidad y comprensión.  No tiene prejuicios y le es indiferente la opinión o la forma de vida de los demás para depositar en ellos su afecto. En algunos casos se podría pensar que, cuanto más rara es una persona, más le atrae.

A su manera, es romántico, a pesar de no ser demasiado cariñoso y de que su tendencia al desapego puede crear una cierta distancia emocional. ACUARIO te dedicará el más delicado de los cumplidos el día que tu aspecto te parezca casi horroroso, llenándote de alegría el alma,  pero va a ignorar la más larga sesión de peluquería y estilismo que te puedas permitir. No es fácil de aceptar pero es que sus ojos van directos al corazón.

En su pareja buscará afinidades intelectuales y la posibilidad de compartir intereses. Para seducirle es importante tratarle como a un amigo pero manteniendo un cierto misterio o, simplemente, ignorarle. En la pareja necesita un aporte constante de estímulo y novedad y lleva muy mal la monotonía que, indefectiblemente, conlleva la convivencia.

Es dado a flechazos y atracciones súbitas e inesperadas. Entonces ACUARIO se precipita, pues no sabe vivir las distintas fase que llevan de la atracción al amor. Tiende a formarse una imagen irreal, que le lleva a enamorarse más de ese ideal que de la persona. Por ello es propenso a rupturas fulminantes, que supera con bastante facilidad logrando hacer realidad la posibilidad de “seguir siendo amigos” tras la separación, que suele ser muy civilizada.

De alguna manera es como si hubiera nacido para cambiar y por ello mira siempre hacia delante, pensando en todo lo que le queda aún por descubrir ya que para este signo todas las personas son “especiales” en potencia. En ocasiones se casan de repente, cuando ya nadie se lo espera. Pero aún convencido y viviendo un matrimonio feliz, su casa estará llena de amigos –tanto como de sillas y butacas para que estén cómodos- y puede ceder una habitación  a alguna asociación o grupo con fines sociales en el que participe.

Las reuniones familiares, claro está, son otra cosa y le cuesta integrarse. ACUARIO es inconformista por naturaleza y no le resulta fácil aceptar la tradición. Su hogar será amplio, decorado en tonos fríos, más bien claros, con espacios vacíos para moverse y tener sensación de libertad y se reservará una habitación para cuando desee estar solo. Escogerá muebles funcionales, de líneas rectas y diseño moderno tirando a vanguardista y los renovará con frecuencia.

Siempre que le sea posible, dispondrá de los últimos avances tecnológicos e informáticos y de todos los aparatos electrónicos que se puedan imaginar, desde la cadena de alta fidelidad más pequeña del mercado hasta el último grito en videojuegos. Aquello que pueda tener en formato “virtual” no lo tendrá en el tradicional, por supuesto. La decoración no resultará muy convencional y, desde luego, el orden no será impecable ni los horarios o las costumbres muy estrictos. No obstante, ACUARIO suele mantener algún tipo de hábito raro o dieta especial que mantiene contra viento y marea.

Como no podían faltar las sorpresas, destacará algún mueble y objeto muy antiguo y no sería raro encontrar algún premio a su labor humanitaria junto a un telescopio o la reproducción de alguna nave espacial. Podemos encontrar un prototipo de robot doméstico, un sintetizador o un motor de automóvil a medio desmontar. El arte habitualmente será de vanguardia o siguiendo alguna tendencia que vaya contra corriente a la moda.

En su biblioteca, que sus amigos saquean a menudo cabe casi todo: tratados técnicos, divulgación científica o esotérica, ecología, sociología o ciencia ficción. También podemos encontrar obras de escritores desconocidos –que pueden ser la revelación del próximo año- o las obras completas de Julio Verne, si es posible recopiladas en un C.D. room.  Escucha jazz, por su especial vibración rítmica o es un aficionado al “tecno” y a la música electrónica en general.

ACUARIO es refinado en sus aficiones, detesta la vulgaridad y posee un gusto original cuando no algo estrambótico. Tiene un encanto especial y un carisma innegable que le hace ser popular, pero puede dejar a su paso tantas adhesiones como desconcierto, ya que le encanta provocar y salirse de la norma.

Acostumbra a tener muchos conocidos y a trabar instantáneamente amistad con cualquier persona que se le pone a tiro, pero en el fondo sus amistades profundas son pocas. En la amistad da siempre más de lo que pide pero se diría que la cantidad prevalece sobre la calidad. Se mueve en grupos pero, en ese contexto, se siente más que nunca un solitario. 

El tema de los hijos le resulta algo desconcertante pues conlleva una dedicación constante y exclusiva hacia alguien que, además depende de ellos. El ACUARIO hombre, especialmente,  se sentirá más cómodo con la paternidad cuando los niños son algo mayorcitos y puede tener con ellos una relación de compañerismo.

La Profesión de Acuario

Este es el signo ideal para dar un nuevo aire a cualquier empresa. Su capacidad para innovar y adelantarse a su tiempo pueden darle muy buenos resultados en el ámbito profesional. Pero ACUARIO no soporta la monotonía y necesita que su trabajo le interese y estimule su intelecto. Da lo mejor de sí en horarios flexibles o trabajando por su cuenta.

Siempre bien informado, utiliza todos los medios a su alcance y procura disponer de todas aquellas innovaciones que puedan facilitar y mejorar su tarea. Busca la calidad en lo que lleva a cabo y es capaz de sacar adelante aquello que otra persona no ha podido solucionar. Brillará, pues, a nivel laboral como destacan sus ideas a veces geniales, pero su rendimiento no es constante ya que tiene muchos altibajos.

A pesar de que tiene que trabajar a su aire, y funciona un poco a rachas, es un buen trabajador de equipo.  Es un gran colaborador que sitúa los intereses del colectivo y de la empresa por delante de su conveniencia. Puede llegar, incluso, a anteponer sus ideales a su vida personal. No le falta la ambición y suele ascender con rapidez, pero el éxito no es su prioridad, ya que prefiere desempeñar un trabajo que le resulte interesante.

Por sus innatas dotes de liderazgo todo tipo de grupos, suele ser el encargado de transmitir planes de trabajo y explicar decisiones de la superioridad. Puede, asimismo, organizar y mejorar las relaciones entre sus compañeros.  ACUARIO, obviamente, no es complaciente ni “pelota” pero suele estar bien considerado.

Es el empleado adecuado para tratar con clientes o proveedores difíciles o para dar la cara cuando se produzca algún conflicto: en pocos minutos les habrá hecho sus amigos o reconvertido la situación. No es un signo muy inclinado a ejercer autoridad, pero como jefe será justo, comprensivo e innovador aunque poco flexible y de ideas fijas.

Puede cambiar de trabajo más a menudo que otros signos, de un modo casi intuitivo, a no ser que su profesión le resulte altamente estimulante y le ofrezca posibilidades de cambio y renovación.  Del mismo modo es frecuente que, sin buscarlas,  tenga oportunidades inesperadas en el trabajo.

La gama de posibilidades es amplia y variada y engloba como regla general todas aquellas que se conocen como nuevas profesiones y profesiones liberales.

ACUARIO se dedica a la aviación, trabaja en una estación espacial, planetario u observatorio astronómico; es astronauta, ingeniero aeroespacial, especialista en satélites, piloto o auxiliar de vuelo, instructor o paracaidista. Le gustan los motores y puede ser mecánico o camionero, conductor del tren de alta velocidad o construir altísimos rascacielos y planificar las ciudades del futuro.

Puede enseñar o especializarse en la re-educación de personas con problemas, trabajar en organismos internacionales de cooperación y ayuda mutua o centros cívicos. Será periodista, publicista, escritor de novelas de ciencia ficción o tratados sobre telepatía y ciencia en general. Se dedicará a la música de jazz o electrónica, será técnico de sonido y artista de vanguardia.

Puede trabajar en  radio o televisión, como realizador, cámara o director de cine y especializarse en el diseño y reparación de todo tipo de aparatos electrónicos. Es el especialista en informática, INTERNET, telefonía, alarmas y mandos a distancia y pionero de las autopistas de la información.

En realidad, ACUARIO es el signo de los inventores y toda aquella profesión en que puedan aplicar la ciencia le atrae. Es asimismo el signo de la Astrología. Será especialista en robótica, planteando posibilidades que están aparentemente lejos de ser realidad o trabajará con rayos X. También puede dedicarse a la ecología y nuevas tecnologías, a trabajar con energías no contaminantes o al reciclaje.

Le gusta la sociología y la etnología. En política tiende a sentirse realizado siendo el legítimo representante del pueblo y es el auténtico sindicalista, siempre un revolucionario en ciernes.

ACUARIO es un buen auditor de empresas y, si siente atracción por las especulación y las finanzas, suele obedecer a que representan un estimulante ejercicio intelectual más que una vía de beneficio personal

Acuario y la salud

En el organismo, ACUARIO, representa la circulación sanguínea y los tobillos. La sangre, como reflejo de nuestra energía vital, parece fluir mejor si tenemos alegría y unas buenas perspectivas para el futuro.  Los tobillos, por su parte, hacen posible que nos elevemos por encima del suelo.

Así este signo es propenso a las roturas de ligamentos, esguinces y espasmos. De mente rápida pero cuerpo algo lento, puede faltarle fuerza muscular y tener problemas de varices y en las pantorrillas. Es muy nervioso, dado a la ansiedad y el insomnio o a tener los ritmos de sueño y vigilia alterados.   Es dado a las palpitaciones, problemas cardíacos o trombosis, así como a la anemia.

Le favorecen las técnicas de relajación, el ejercicio físico y algo tan simple como el aire fresco. Muchas veces, poco consciente de las necesidades y limitaciones del cuerpo,  ACUARIO no se cuida o cambia de tratamiento demasiado deprisa, sin darle tiempo a actuar.  Las medicinas alternativas o los métodos innovadores les resultan favorables.

Para terminar, repasaremos algunos rasgos del físico de ACUARIO. Hay  que tener en cuenta que estas características, igual que el resto de detalles de la descripción del signo, son generalizaciones y que cada persona (según el resto de posiciones planetarias de su Carta Astral y su voluntad de mejora y conocimiento personal) las vivirá de diferente manera.

El signo de ACUARIO favorece una estatura mediana/alta, cabello ondulado y más bien claro, con ojos grandes de un tono suave (gris, azul o verde) y algo fríos. La mirada es amistosa y limpia  pero un poco distante. La piel es clara, la nariz, recta y el perfil bien delineado, con facciones agradables,  y su aspecto se mantiene juvenil.

A pesar de estar bien proporcionado, puede resultar algo desgarbado, como si no se sintiera a gusto en su cuerpo, y tener una expresión algo distraída. En su apariencia suele haber algo original si no extravagante. Así y todo, mantiene ese encanto, único e indefinible que nunca le permite pasar desapercibido, como si supiera algo especial o estuviera a punto de descubrirlo.

ACUARIO conoce el sentido de la cita de Rudyar Kipling que dice “Puedes amar como hermanos a todos tus amigos sin que ninguno de ellos lo sea todo para ti” pero a veces se le olvida que para llegar a conectar con la conciencia universal en primer lugar necesita conectar consigo mismo.

Famosos nacidos bajo el signo de Acuario

Lola Flores, Mia Farrow, Bertold Brecht, Charles Dickens, Stendhal, Abraham Lincoln, Darwin, Francis Bacon, Thomas A. Edison, V. Giscard d’Estaing, Somerset Maugham, Colette, Georges Simenon, Vanessa Redgrave, Julio Verne, Charles Lindberg, Mendelssohn, Ronald Reagan, Andre Breton, Lewis Carrol, Manet, Schubert, W. A. Mozart, Príncipe Felipe de Borbón, Federico Mayor Zaragoza, Carolina de Mónaco, Miguel Boyer, Isabel Preysler, Jack Lemon, Kim Novak, Paul Newman, Mia Farrow, Clark Gable, Jeanne Moreau, James Dean, Galileo, Plácido Domingo, Abraham Olano, Geena Davis.